Sabemos
del hueco irremediable
de las manos
detrás
de cada despedida.
De las palabras
que se ahogan en silencio
en ese quijotesco
intento de agotarlo.
Del oasis del amor
al que arribamos
para calmar la sed
de un abrazo infinito.
Y porqué todo
se desnuda al fin
sabemos
de lo astillado
de lo roto
y la vida, esta piedra
de un oscuro fulgor
nos pesa por igual.
¿Por qué
todo nos hiere si nos toca
aunque lo haga
con la forma de un beso?
Nestor Alonso
1 comentario:
Quiero felicitar a mi amigo de hace tantos años por su maravilloso trabajo! te felicito Nestor!estoy orgullosa de vos!!!!
Publicar un comentario